La Neonatología es el área más vulnerable que existe en el ámbito hospitalario. Por eso, la vinculación entre enfermería y cuidados intensivos neonatales es clave. Las y los profesionales de enfermería deben adquirir conocimientos y técnicas que les permitan brindar la atención de calidad que merece cada recién nacido/a.

“Nuestra profesión es un constante aprendizaje. A medida que pasaron los años, la Neonatología fue adquiriendo nuevas técnicas que demuestran la sobre vida del recién nacido prematuro. Desde nuestro humilde lugar, queremos compartir estos avances”, señala la licenciada Elena Clara Yacquet, Jefa de Enfermería del servicio de Neonatología del Hospital Posadas y directora del curso de Océano Medicina “Enfermería y Cuidados Intensivos Neonatales”.

Cuidados de enfermería para un/a recién nacido/a

La licenciada Yacquet expresa que los cuidados que se deben realizar a un/a recién nacido/a estarán sujetos a una serie de datos que enfermeras y enfermeros deben saber en el momento del parto.

Es preciso que las/los profesionales conozcan los antecedentes maternos y la edad gestacional del recién nacido. Ese es el dato principal para coordinar el recibimiento y los cuidados necesarios, así como también el orden de dichos cuidados.

Según la especialista, las acciones que llevarán adelante las y los profesionales de enfermería en ese contexto, pueden sintetizarse en los siguientes puntos:

• Una vez que se recibe al recién nacido sano, es muy importante secarlo de forma vigorosa. Esto permite estimular al bebé y evitar pérdidas de calor.
• Colocar compresas tibias. Este procedimiento se realiza en servocunas radiantes.
• Controlar el campleo del cordón umbilical.
• Controlar los signos vitales: evaluar la frecuencia cardíaca y respiratoria.
• Analizar la temperatura corporal y valorar el color de la piel y el llanto.
• Identificar al bebé con la pulsera correspondiente a la de la mamá.
• Permitir que la madre ejerza contacto con la piel del bebé antes de realizar los percentiles. Esto estimula el vínculo desde la hora de oro.
• Realizar la higiene del cordón umbilical.
• Fomentar la lactancia y el vínculo familiar.

Obstáculos para estos cuidados

De acuerdo con la licenciada Yacquet, uno de los principales inconvenientes ante el recibimiento de un recién nacido es no contar con los recursos humanos y tecnológicos suficientes.

También, la especialista menciona como un obstáculo la falta de conocimientos de las y los profesionales de enfermería ante eventos como el nacimiento de un recién nacido prematuro.

Medidas de prevención y control de infecciones en neonatología

Para Yacquet, una de las acciones centrales para evitar infecciones en el área de neonatología es trabajar en equipo con el comité de infecciones. Esto implica, por un lado, desarrollar charlas con el plantel de enfermería, médicos/as, interconsultores y familiares sobre el lavado de manos. Y, por otro, señalizar y distinguir el área limpia del área contaminante.

La higiene del ambiente donde se encuentra el/la recién nacido/a es de extrema importancia. Por este motivo, el personal ayudante de enfermería recibe un curso de capacitación para la descontaminación de las unidades.

 “Los recién nacidos son controlados una vez por semana por medio de un hisopado. El seguimiento lo hace el área de infectología y es un excelente indicador de los índices de colonización e infecciones”, explica Yacquet.

 Cuidados para el desarrollo neuronal del recién nacido

Otro punto relevante, es el despliegue de maniobras para el correcto desarrollo neuronal de los neonatos. Para ello es preciso realizar las siguientes acciones:

• Disminuir la luz y los ruidos.
• Controlar el dolor, por medio de una escala de medición.
• Evaluar, rigurosamente, posiciones posturales.
• Utilizar el protocolo de PIO (Protocolo de Intervenciones Oportunas). Esto disminuye el grado de estrés del neonato.